
St Lukács (Szent Lukács Gyógyfürdő) es uno de los famosos baños de Budapest. En Buda, cerca de la isla Margit, todas las guías turísticas señalan que es un punto de encuentro del mundo artístico local. Desde su apertura en 1760 fue sufriendo distintas remodelaciones y ampliaciones.
La entrada, un enorme patio rodeado de árboles añejos y construcciones antiguas, conduce a uno de los más grandes spas, después del popular Széchenyi. Las aguas termales van variando de temperatura con un máximo de 40°. Al principio se siente caliente, pero aseguro que el cuerpo se acostumbra. Después de esto, los 24° se sienten como hielo.
Además hay otras dos piletas climatizadas para nadar al aire libre y olvidarse por un tiempo del crudo invierno. Una linda sensación la de zambullirse rodeado de árboles nevados.

Consejo: no sólo no hay carteles en inglés sino que St. Luckács por momentos más que un spa parece un laberinto de pasillos y vestuarios. Lo mejor es armarse de paciencia y tratar de preguntar o recorrer un poco para no perderse nada.
Si quieren nadar en las piletas al aire libre (no para las aguas termales) van a necesitar una gorra de baño. Si no, también la pueden alquilar por 300 forints (1 euro). Nada de pelos al viento!

Frankel Leó út 25-29 (Distrito II).

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